Un análisis de una tormenta de verano ocurrida a fines de enero y una tormenta de otoño ocurrida a mediados de mayo de 2021 en Chile central realizó, a partir de dos imágenes satelitales, el académico del Departamento de Geofísica (DGF) y subdirector del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia, (CR)2, René Garreaud.
La comparación de ambos eventos climáticos fue publicada en la sección, “Imagen del Día”, del sitio web Observatorio de la Tierra (Earth Observatory) de la NASA, con el cual el profesor Garreaud ha colaborado desde mayo de 2019.
En la publicación titulada “Tormenta Dual”, se mencionan los efectos de la primera tormenta de otoño de 2021 y la inusual tormenta de verano de fines de enero último, ambas ocurridas en el centro sur de Chile. Mientras en la imagen del 23 de mayo (lado derecho) quedan en evidencia los 20 a 30 milímetros de precipitación caída en forma de nieve en el lado occidental de la cordillera de Los Andes, en la vista del 4 de febrero (lado izquierdo) se describe el paso de un río atmosférico con 100 milímetros de agua y nieve caída en el lado este de la mencionada cadena de montañas, como consecuencia de fuertes vientos provenientes del oeste.
Según explica el profesor Garreaud, tormentas como la ocurrida en mayo último “son benéficas, porque forman una capa de nieve estacional cordillerana durante el invierno que da agua en primavera y verano”. “El centro de Chile ha experimentado una sequía prolongada, por lo que todas estas tormentas invernales son realmente bienvenidas”, asegura René Garreaud.
Al referirse a la tormenta de fines de enero de 2021, el subdirector del CR2 la describe como “un evento verdaderamente extraordinario”. “El centro de Chile suele estar completamente seco durante el verano, excepto por algunas tormentas convectivas dispersas sobre las cumbres más altas de Los Andes, pero lo que ocurrió a fines de enero último fue como una tormenta de invierno y una gran sorpresa ", destaca.
Sobre este punto, el subdirector del CR2 finaliza su análisis con una precisión final sobre los efectos de la tormenta del verano de 2021 en un ambiente relativamente cálido. El primero tiene que ver con que la mayor parte de las precipitaciones de la tormenta cayó en forma de lluvia, lo cual provocó inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra. El segundo está relacionado con el hecho de que la nieve cayó solamente sobre cerros y planicies ubicadas a más de 3.500 metros de altitud.
La publicación de las imágenes satelitales de la cordillera de Los Andes, tras las tormentas de otoño y verano en el centro de Chile se transformó en la octava colaboración del académico del DGF y subdirector del (CR)2 con Earth Observatory de la Nasa.
Previamente, el profesor Garreaud ya había tomado la iniciativa de divulgar y comentar imágenes de la Patagonia sin nubes y cubierta de nieve, vegetación creciendo en el desierto de Atacama, la zona central de Chile y la laguna de Aculeo afectadas por la sequía, ríos atmosféricos en el sur de Chile y el embalse El Yeso, prácticamente, sin agua.