Tres pasantías de entre tres y cuatro meses de duración realizaron la y los investigadores del Departamento de Geofísica (DGF), Kellen Azúa, Rogelio Torres y Javier Ojeda, en Japón, Italia y Estados Unidos.
Las visitas de investigación de la y los tesistas del Doctorado en Ciencias con mención en Geología de la Universidad de Chile tuvieron como objetivo profundizar conocimientos y avanzar en sus tesis doctorales, a través del trabajo con reconocidas y reconocidos especialistas en terremotos lentos, tectónica activa y propagación de ondas sísmicas.
En el caso de Kellen Azúa, el lugar escogido fue la Escuela de Ciencias de la Universidad de Tokio, en Japón, donde trabajó con el investigador japonés, Satoshi Ide, en la búsqueda y caracterización de tremores no volcánicos en el llamado "Punto Triple Chileno" (Chile Triple Junction, CTJ), ubicado frente a la península de Taitao, y donde convergen las placas tectónicas de Nazca, Sudamericana y Antártica.
“Mi mayor motivación para realizar la pasantía fue poder trabajar con el profesor Satoshi Ide, ampliamente reconocido por su estudio de los terremotos lentos, y también con el equipo de investigadores del Instituto de Investigación de Terremotos de la Universidad de Tokio que participó en la campaña con la que fueron adquiridos los datos sobre el Punto Triple Chileno con los que estoy trabajando para mi tesis de doctorado”, explicó la tesista del Doctorado en Ciencias con mención en Geología de la Universidad de Chile.
Al referirse al valor de la experiencia vivida en la Universidad de Tokio, Kellen Azúa mencionó los aprendizajes y avances logrados en su investigación gracias al trabajo colaborativo con el equipo del investigador Satoshi Ide.
“Poder contar con la guía y la experiencia del profesor Satoshi Ide representó una gran oportunidad para crecer como investigadora”, expresó Kellen Azúa, quien admitió que, a pesar del constante desafío que significó acostumbrarse a otra cultura como la japonesa y vivir en otro país tan diferente a Chile, “la experiencia de esta pasantía fue muy enriquecedora”.
Para el investigador del DGF, Javier Ojeda, realizar una pasantía en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de California Berkeley no sólo representó una oportunidad para avanzar en su tesis doctoral sobre deformación transitoria en zonas de subducción y fallas activas, sino también para conocer cómo funcionan los equipos de trabajo en Estados Unidos.
“En primer lugar, me motivó la idea de trabajar con el grupo de investigación de Roland Bürgmann, reconocido investigador en el área de tectónica activa y de quién sabía que podía aprender mucho para avanzar en mi investigación. En segundo lugar, quería conocer cómo trabajaban en una zona tan activa científicamente como California y, finalmente, consideré importante ir a Berkeley para aportar al acercamiento entre investigadores de Chile y Estados Unidos, en el marco del programa de investigación interdisciplinario, Zonas de Subducción en Cuatro Dimensiones (Subduction Zones in Four Dimensions, SZ4D)”, dijo el tesista del Doctorado en Ciencias con mención en Geología de la Universidad de Chile.
Al profundizar en el aspecto más valorado de su visita, Javier Ojeda reconoció haberse quedado con una muy buena impresión de la rutina de trabajo y la dinámica presente en el Departamento de Ciencias de la Tierra de la Universidad de California Berkeley.
“El Departamento de Ciencias de la Tierra está muy conectado con las labores del Laboratorio de Sismología de Berkeley, por lo tanto, cada semana teníamos reuniones grupales, personales, al menos dos seminarios y otras actividades de estudiantes de postgrado”, afirmó el tesista del Doctorado en Ciencias con mención en Geología de la Universidad de Chile.
En esta línea, Javier Ojeda destacó la experiencia de estar en un departamento de ciencias de la tierra, con toda la diversidad que eso implica. "No solo hablábamos de terremotos o cambio climático, sino que había una conexión con disciplinas como oceanografía, geomagnetismo, geodinámica, ciencias planetarias y gestión de desastres. De hecho, las personas tenían un interés genuino por compartir en qué trabajaban, generar discusiones científicas y conversar con naturalidad sobre los problemas que buscábamos resolver”, aseguró.
Una conclusión similar fue la compartida por el investigador doctoral del DGF, Rogelio Torres, quien permaneció tres meses en el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (Istituto Nazionale di Geofisica e Vulcanologia, INGV) en Roma, Italia, para trabajar en su tesis doctoral sobre generación de terremotos artificiales.
“La experiencia de convivir con investigadoras e investigadores que, a pesar de provenir de una cultura diferente, están interesadas e interesados en el mismo tema que uno está investigando es una forma de darte cuenta de que ‘no estás solo’, académicamente hablando”, manifestó.
Con respectoal trabajo realizado para su tesis doctoral “Simulación del movimiento del suelo del histórico terremoto Mw 9.1 de Valparaíso, de 1730 usando un enfoque estocástico”, el investigador del DGF dijo que el equipo de sismólogas y sismólogos con quienes trabajó tenía gran experiencia en la propagación de las ondas sísmicas.
“Estuve trabajando con la doctora Aybige Akinci y su equipo de especialistas. La doctora Akinci tiene gran experiencia en el área de la sismología y ha colaborado en diversas publicaciones científicas junto a mi tutor, el profesor Sergio Ruiz", dijo Rogelio Torres.
Finalmente, al ser consultado por la experiencia de realizar una pasantía en el extranjero y, particularmente, en un lugar como el INGV, el tesista del Doctorado en Ciencias con mención en Geología de la Universidad de Chile valoró la oportunidad de establecer relaciones “en otro país, con otras costumbres, otra cultura, otro lenguaje y otra moneda”.
“Muchas veces, el aprendizaje resulta ser proporcional al kilometraje recorrido en busca de una solución. Entre más estudiemos, más probable será que obtengamos mejores resultados”, concluyó.
Las visitas de investigación de la investigadora y el investigador doctoral del Departamento de Geofísica (DGF), Kellen Azúa y Javier Ojeda, fueron financiadas por el Programa de Beneficio Complementario de Pasantía de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID). En tanto, la pasantía de Rogelio Torres fue realizada con recursos de ANID, el Consejo Nacional de Humanidades Ciencia y Tecnología (Conahcyt) de México y la empresa de Geofísica chileno mexicana 128Hz.